Últimos pasos en Valpo

Viernes 12 de Enero, 2018

(Valparaíso, Chile)

Me levanté bien temprano, me bañé y desayuné. Conocí a unos argentinos de La Plata a los que les habían robado todas las cosas del auto la noche anterior, incluyendo la cámara de fotos.

Con el triple de cuidado salí para la estación de buses para buscar un boleto a Iquique para ese mismo día. Lamentablemente las salidas de las 17hs no tenían más cupo. Había solo para el sábado a las 10 A.M. por 34.600 CHP. Lo tomé y agradecí por tener un día más en Valpo aunque el plan de viaje se me haya complicado. Volví al hostel y reservé una noche más.

Debido a los grandes gastos de ese día planeé moverme poco para bajar gastos y volver al orden financiero.

Pasé el resto del día en la cama para evitar la tentación de gastos. Además la fiebre de fascinación con Valparaíso me estaba empezando a bajar. Mirar la postal que ofrecía mi ventana me clamaba un poco.

Después de un rato, salí a buscar un mirador para leer el libro de Isabel Allende. El Pasaje Atkinson estaba repleto de turistas así que fui al mirador del Museo Lucas. Sentado frente a una de las simpáticas figuras del caricaturista, me sumergí en el Chile Imaginado de la escritora chilena. Cada página me hacia entender mejor a la gente que caminaba a mi lado y por eso creo que no lo dejé. No es un gran libro en sí. Es más bien una recopilación de memorias de la autora. Su descripción de la sociedad y la vida cotidiana dan una idea de país sufrido y melancólico. Volví arrastrando los pies entre las calles adoquinadas de los antiguos arrabales.

Cene cerca de las 20:45 y me fui a dormir. Chile estaba bien pero era muy parecido a la Argentina. Como si la Cordillera de los Andes fuera el espejo blanco que nos reflejara.

#Chile