Días en el Oasis [Huacachina - Perú]
- misdiariosdeviaje
- 5 sept 2018
- 2 Min. de lectura
Miercoles 24 de Enero, 2018
(Huacachina, Perú)
Llegué al oasis de Huacachina. A las 7 AM pisé la ciudad de Ica y de allí tomé un taxi hasta el ojo de agua. Allí hay variedad de hostels y hoteles para elegir precio y calidades. Yo elegí el Rocha Hostel.

En el hall del hostel conocí a dos argentinas (Luciana y Willen) que estaban esperando que se desocupe su futura habitación al igual que yo. Nos fuimos a tomar mate a la laguna y sentí nuevamente la sensación de haber llegado “al lugar de la foto”.

El oasis consiste en una laguna rodeada por inmensas dunas de arena. El espejo de agua esta recorrida por una costanera o malecón repleta de restaurantes y bares. La visión es paradisiaca.

Pasé el día en la pileta del hostel para volver a las dunas al atardecer. Los buggies surcaban los médanos a gran velocidad. Tomé la decisión de trepar hasta la punta de una enorme montaña de arena para ver el atardecer. La subida costó y se hizo difícil, pero una vez arriba el paisaje fue impagable.

Me senté y vi desfilar todos los colores frente a mis ojos. Arena y dunas hasta donde llega la vista. La paz del lugar vale la pena. Voy a estar acá hasta el martes seguramente. Comienzo a sentir la sensación de estar de vacaciones. De descanso y de freno en tanta aventura.
VIDEO:
Jueves 25 de Enero, 2018
(Huacachina, Perú)
Me levanté cerca de las 10 AM y fui a la pileta. Allí encontré a las tres argentinas que había conocido en el hostel del Cusco. Venían de Puno con dos argentinos mas. Me puse a hablar con ellos y comenzamos a congeniar.
Almorcé una hamburguesa y me dormí para probar la pileta a la tarde. Cuando me levanté, me metí para refrescarme del pesado calor del desierto. Terminamos tomando mate en la laguna antes del atardecer.
Cuando llegaba la hora del espectáculo, los invité a subir a mi duna. Empezamos a subir pero una de ellas se quedo en el camino y tuve que bajar con ella. La deje con las chicas de La Plata que había conocido el día anterior. Volví a subir la duna y me encontré con el mejor atardecer de mi vida.
Bajé tarde con una de las chicas. El sol se había ido, la noche era eterna y estrellada. Con una sonrisa azul, bajé en medio de la oscuridad. Nos juntamos todos alrededor de la laguna y fuimos por unas pizas en una casa de comidas atendida por una salteña. El día y la noche terminaron de forma memorable.
Viernes 26 de Enero, 2018
(Huacachina, Perú)
Cumplo 20 días de viaje y estoy disfrutando de lo que será mi última semana en Perú. Tenía planeado ir a los buggis pero otras distracciones me dejaron con sueño.
Dejé pasar el resto de la tarde en la pileta con los vagos y por la noche comimos unas hamburguesas en un food track. Dormí con la cabeza en Paracas.
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